domingo, 26 de mayo de 2019

Australia VII - Bay of Islands

Hay paisajes que nos atrapan a pesar de su aparente sencillez. Unos pocos colores parecen bastar, mientras las horas transcurren allí como si fueran minutos. El sur de Australia es uno de ellos, como pudimos comprobar en noviembre de 2017.

Dejamos atrás Port Campbell con cierta renuencia, pero era momento de seguir camino por la costa, porque aún nos quedaban muchos sitios por ver.


Nuestra primera parada sería la Bahía de los Mártires, que forma parte de un tramo de costa protegido más grande, que abarca 33 km de largo. Allí hay dos caminatas muy sencillas de hacer, la que lleva a Halladale Point y la que transcurre por la espléndida playa. La tarde anterior habíamos llegado hasta aquí, pero ahora, con la luz de la mañana el paisaje es más acogedor.





Es, como digo, un área protegida en la que entre otros animales pueden verse focas y pingüinos, pero nosotros no tuvimos tanta suerte, por lo que hubimos de conformarnos con otros alicientes, como el viento y las olas. Los primeros vienen directamente de la Antártida, sin que ningún obstáculo pueda detenerlos y cuando hay tormenta pueden formar olas de 30 metros de alto. Debe ser todo un espectáculo.



Tamaña fuerza de la naturaleza esculpe sin cesar los acantilados, erosionando las partes más blandas, por lo que las más duras quedan como columnas e islotes de piedra caliza, donde anidan las aves.




Los Kirrae Whurrong son aborígenes que han vivido aquí durante milenios, atraídos por la riqueza natural del entorno y la facilidad de encontrar abrigo y comida, pero tampoco nos encontramos con ninguno de ellos. No en vano, el contacto con los primeros europeos motivó el declive de su población hasta niveles dramáticos, de modo que fueron trasladados en busca de una mayor protección y una mejor educación que permitiera su integración. Contrariamente a lo que sucede en Nueva Zelanda, los nativos australianos no parecen tener mucho protagonismo en la sociedad moderna.



Mientras tanto, el mar crea y destruye nuevas esculturas, en un proceso interminable. La frágil roca caliza comenzó a formarse hace entre 10 y 20 millones de años, en el Mioceno, cuando esta parte costera se encontraba sumergida, formando capas de distinta dureza que son las que vemos hoy en día, erosionándose a ritmos diferentes.




El mar va encontrando su camino y se adentra en la tierra como un conquistador implacable, ofreciéndonos bellas formaciones rocosas que no pueden perdurar mucho.





De haber dispuesto de más tiempo, nos habría gustado bajar a las playas para explorar las muchas cavernas, pero hubimos de contentarnos con visitar los miradores, teniendo cuidado, eso sí, de no salirnos de los senderos. Aquí la tierra es frágil, y no conviene acercarse demasiado al borde, aparte de que al ser un lugar protegido hay que respetar la fauna y la flora.

11 comentarios:

  1. Que interesante... Un paisaje en continuo cambio. Si vuelves pasados unos años, ya todo será distinto.

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  2. Es curioso, Australia por estar rodeada de agua se la podría considerar una isla, sin embargo y por su tamaño se la podría considerar un continente.
    Según he leído, Australia es el sexto país más grande del mundo con una superficie de 7.741.220 km².

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  3. "Hay paisajes que nos atrapan a pesar de su aparente sencillez".
    Esa primera frase me atrapó a mi, con su aire intimista y sugerente.
    Y debo reconocer que seguro en parte por ello, he recorrido esta entrada con ojos tan cercanos como si estuviera en persona, hic et nunc.
    Hay rincones que hablan solos.
    Y algunos parecen hasta llamarte por tu nombre.
    Cuando dejamos actuar a la naturaleza que siga su curso, nos encontramos con parajes así de grandiosos y especiales.

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  4. O interessante é que na natureza tudo se transforma constantemente
    com certeza hoje deve estar um pouco diferente.
    Achei um lugar lindíssimo imagina as cavernas lindas que tem.
    Ainda bem que é protegido.
    Falar em proteção esse atual presidente por aqui quer transformar sítios protegidos por lei ambiental ou paraísos ecológicos em uma nova Cancun! é triste.
    Boa entrada de mês de junho.
    Paz e Bem.

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  5. Ningún artista es tan paciente, tenaz y creativo como la propia Naturaleza y las fuerzas que la invisten soberana y que hacen de la eosión el cincel más preciado.

    Sólo conozco Australia por los documentales, como ya comenté una vez, que muestran esos contrastes extremos del territorio. Qué pena que sus habitantes de origen hayan quedado, salvo excepciones, en las sombras.

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  6. Sabias palabras que agrandan tu capacidad como observador de la naturaleza. Me gusta ese: a falta de pingüinos y focas, "hubimos de conformarnos con viento y olas" aparte del maravilloso paisaje del lugar que satisface la curiosidad de cualquier curioso medioambiental.
    Saludos.

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  7. Uno desaparece y otros se mudan jajajaja
    Con la abstinencia de mar que tengo y vos que nos traes esta maravillosa vastedad.
    Precioso.

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  8. Senior Citizen, y tanto, de los 12 Apóstoles ya solo quedan 11 y un puente de piedra se hundió hace pocos años. Aquí asistimos al cambio en vivo y en directo.

    Un jubilado, para que hagas una idea, va desde Portugal hasta Israel y desde Italia a Noruega. Es enorme, y aunque casi todo el centro es un inmenso desierto, hay espacio más que suficiente para encontrar un poco de todo.

    Nélida G.A., la mayor parte de los turistas pasan por aquí sin detenerse. Nosotros estuvimos una semana y nos faltó tiempo para disfrutarlo con calma, y es que cada uno respiramos de forma diferente. Tuvimos mucha suerte con el clima y con la falta de gente, así que pudimos disfrutar del entorno con una calma infinita.

    A Casa Madeira, confío en que Brasil siga protegiendo al máximo su mucha diversidad ecológica. Sería muy triste que lugares tan bellos se echaran a perder por meros intereses económicos.

    Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.

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  9. Una mirada, los aborígenes demasiado hacen con sobrevivir, pues hace poco los mataban a tiros por estar considerados parte de la flora y fauna del país, lo que no habla muy bien de los australianos de origen europeo. Ahora los tienen medio alcoholizados y con una integración mínima que en poco les ayuda. Por lo demás, el país es precioso y está lleno de rincones que son una maravilla. Hay poca población y la Naturaleza manda.

    Javier G., el que no se consuela es porque no quiere. Me habría gustado ver más fauna, pero entre el calor y la inmensidad del territorio la cosa no era fácil para los que, además, vamos con prisas. No obstante, el paisaje ya te compensa con creces.

    Nella, es que te fuiste demasiado tiempo ;) Ya se te echaba de menos.

    Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.

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  10. Qué maravilla de paisajes y esculturas naturales. El mar en su potencia es constructor y destructor. El tiempo los acompañó, me extraña que no te hayas dado un remojón en esas hermosas playas. Magníficas fotos. Gracias. Beso grandote.

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  11. Rosa María, en general tuvimos mucha suerte durante todo el viaje. Estos paisajes sobrecogen, por lo grandes que son, por lo aislados que están y por su belleza. La naturaleza hace bien su trabajo. Un beso y gracias a ti.

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